top of page

CNE: el poder sin poder


Efectuando el TSJ lo que al CNE le corresponde y tampoco ha hecho estamos ante una usurpación de funciones. Foto: Archivo I21

Antes que nada y aunque sea un poco pesado, ya a tres semanas del triunfo sin lugar dudas de la oposición en nuestra Venezuela, debemos aclarar que las visiones tanto dentro como fuera de las fronteras patrias, están ciertamente divididas, el anhelo de muchos es que a

nivel internacional la presión sea de tal magnitud que se logre el cambio manifestado en las urnas, pero esa rapidez ya se nota que no es tal y es entonces cuando inician los desgastes, las depresiones y se van generando nuevos escenarios que hay que tener en cuenta. Sin embargo, los ojos de millones están puestos en el proceso extraño que se vive en el Tribunal Supremo de Justicia, que adelanta una actividad cuyo nacimiento no está claro para nada, ya que desde el principio ha sido muy pero muy confuso. No hay que olvidar que así es

que le gusta actuar al régimen: siempre a la sombra y esperar para dar el golpe maestro.


Pero volvamos por un momento a lo que nos interesa: solo para recordar debemos tener presente que desde la entrada en vigencia de la actual Constitución Nacional se rompió el esquema de muchos años respecto a la tradicional división de poderes en nuestro país, en

consecuencia se paso a una penta división, ya que se incorporaron a los ya tradicionales Ejecutivo, Legislativo y Judicial, el Poder Electoral y el Poder Ciudadano, teniendo cada uno sus propios aspectos que normar y las competencias respectivas, sin olvidar que de igual

manera son lineales, es decir, ninguno está por encima del otro, al menos ese es el espíritu propósito y razón plasmado en la Carta Magna.


Bien, partiendo de lo anterior, es que nos parece una total falta de independencia lo que ocurre en el Tribunal Supremo de Justicia, que sin despejar dudas, ha asumido de modo inequívoco pero abrupto las funciones del poder que está llamado a ejercer el control sobre todos los procesos electorales que se lleven a cabo en Venezuela, justamente por medio del cuerpo colegiado que conforma el Consejo Nacional Electoral.


Hasta la fecha de la publicación del presente artículo de opinión, dicho cuerpo colegiado parece no existir, ya que todo lo hace y ordena una sola persona. En este caso, el actual presidente del CNE quien notoriamente es ficha del Chavismo desde hace mucho tiempo, entonces ya se aclara un poco el panorama, ya vamos entendiendo lo que pasa y también lo que sucederá cuando la Sala Electoral del TSJ emita la famosa sentencia.


Vemos pues cómo se ha ido configurando un fraude continuo solapado de una justicia que lejos de ser ciega, actúa sin venda en los ojos, mirando claramente a quién puede favorecer. Es así de claro lo que estamos observando. Lamentablemente cierto. El TSJ ha montado un perfecto Show que quienes sabemos de procesos electorales detectamos desde el inicio. Actuaciones que son puro teatro y nada tienen de verdad, sin testigos, sin participación de las partes involucradas. En fin, una mal montaje de lo que tratan de hacer creer que es verdad.


Muy importante no olvidar que efectuando el TSJ, todo lo que al CNE le corresponde y tampoco ha hecho, estamos ante la presencia de una clara violación de las normas legales, en cuanto a lo que se denomina usurpación de funciones y siendo así, debemos destacar

inmediatamente lo que reza la propia constitución en sus artículos 137 y 138, a saber:


Artículo 137 de la CRBV: “La Constitución y la ley definirán las atribuciones de los órganos que ejercen el Poder Público, a las cuales deben sujetarse las actividades que realicen”.


Artículo 138 de la CRBV: “Toda autoridad usurpada es ineficaz y sus actos son nulos”.


Ponemos entonces la mirada sobre el art 138 y de allí se desprende la respuesta de lo que debe acatarse cuando el TSJ emita la manipulada sentencia que cocinan, nada de lo que han hecho o hagan en materia que no es de su competencia es válido y mucho menos debe acatarse, porque son nulos de toda nulidad aunque disfracen el modo de presentarlo a la opinión pública.


Lo cierto es que el CNE es en este momento un Poder sin Poder alguno, convertido por el momento en el Ministerio del Poder Popular para las Trampas Electorales del régimen Chavista, que con la derrota propinada el pasado 28 de Julio, no ha tenido más remedio que

robarse las elecciones para no perder el poder.


Seguirán las presiones luego de la sentencia, si por supuesto, de lado y lado, lo que no podrán cambiar es el resultado de las Actas, esas que muchos obtuvieron la misma noche del cierre del proceso, que son varias por cierto, no 1 o 2, son muchas más y por eso es que el régimen anda como loco, tratando de cambiar ese resultado. Lo del TSJ es una jugada nula, ese material perdió su validez al no estar debidamente resguardado. Por eso es que están hasta el cuello. Existe ya mucha gente vinculada al Chavismo que está reaccionando.

Prefieren abrirse que ser cómplices de lo que vendrá, porque tengan la seguridad que esto no se va a quedar así, el tiempo nos dará la razón.


Los resultados son claros e inobjetables. Ni creando el nuevo ministerio pirata que vigilara los ciber ataques podrán cambiar lo que sucedió el 28 de julio. Esa tesis del hackeo nació muerta y se ha demostrado hasta el cansancio que no ocurrió. De haber sucedido, violentar de modo alguno la transmisión de resultados, por lo tanto debemos seguir enfocados, trabajando en pro de que de un momento a otro negociarán para irse con el rabo entre las piernas y así poder iniciar la reconstrucción de todo lo que han destruido por tanto tiempo.

Así de simple y sencillo.


0 comentarios

Entradas relacionadas

Ver todo

Comments


bottom of page