![Héctor Cabrera tuvo varias presentaciones cantando a dúo con la argentina Libertad Lamarque. Foto: Archivo AJM](https://static.wixstatic.com/media/335561_6a663c0d1a434886998436f658d8d00c~mv2.jpg/v1/fill/w_147,h_62,al_c,q_80,usm_0.66_1.00_0.01,blur_2,enc_avif,quality_auto/335561_6a663c0d1a434886998436f658d8d00c~mv2.jpg)
Se están cumpliendo 93 años del nacimiento del fallecido cantante Héctor Cabrera, que tuvo lugar el 13 de febrero de 1932 en el caraqueño barrio de El Guarataro, en la parroquia San Juan. Se le considera uno de los vocalistas venezolanos de mayor calidad interpretativa, poseedor de un virtuosismo que le permitía acometer con notable solvencia la más variada gama de géneros de la música popular, desde boleros, tangos, valses y baladas, hasta las composiciones de raíz folklórica y nacionalista.
Héctor Cabrera recibe sus primeras lecciones de canto en la adolescencia, como alumno del maestro Juan Martín de Armas. En 1947 comienza a cantar en un programa radial de aficionados llamado La Corte Suprema del Arte, acompañado de la orquesta de un joven pianista llamado Aldemaro Romero. En 1949 debutó como profesional en Radiodifusora Venezuela, continuando luego en los programas La caravana Camel, Desfile Chesterfield y Fiesta fabulosa, este último en Radio Caracas Radio, respaldado musicalmente por el maestro Billo Frómeta y su orquesta.
Posteriormente ingresa como intérprete de música venezolana en el grupo Los Juancheros, con el cual hace sus primeras grabaciones en 1951. Estando allí conoce a Juan Vicente Torrealba, a través del popular cantante Mario Suárez, quien sería su padrino artístico. A partir de ese momento interpreta temas del gran maestro, siendo el primero de ellos Rosario, acompañado por Los Torrealberos, con el cual iniciaría una larga cadena de éxitos.
En 1958 realiza sus primeras giras por el exterior, al presentarse en Puerto Rico y Colombia. A su regreso continúa con Los Torrealberos, hasta que en 1960 el empresario José Pagé lo contrata para Velvet, su sello discográfico, empresa que resultó fundamental en su proyección artística nacional e internacional, con actuaciones en México, Estados Unidos y Europa, así como en los más prestigiosos programas de nuestra TV, como El Show de Renny.
Una época estelar
En pleno apogeo del Festival de San Remo, a finales de los 60 e inicios de los 70, grabó versiones en español de los más famosos temas de esa competencia musical, entre ellos No pienses en mí -uno de sus éxitos más resonantes-, Cuando niño y La voz del silencio.
En 1970 conoce al productor argentino Aldo Fabré, quien lo lleva a la capital porteña para participar en el IV Festival de la Canción de Buenos Aires con el tema Las cosas que me alejan de ti, del cantautor Jean Franco Pagliaro, donde obtiene el primer lugar. Al regresar a Venezuela se encuentra con Mirtha Pérez, quien había ocupado el segundo lugar de este festival el año anterior con La nave del olvido. Con ella graba la canción Acompáñame, de Augusto Algueró, una versión del original de Rocío Dúrcal y Enrique Guzmán, que sumó a su amplia lista de sucesos de difusión y ventas, en la cual figuran también Ayúdame Dios mío, Presentimiento, Aquella noche, Por el camino (a dúo con María Teresa Chacín), Estampa, Cariño mío, La quiero porque la quiero y Con eso me pagas, entre otros.
Se residencia en Argentina por varios años, país que lo acogió como suyo y en donde destacó básicamente como cantante de tangos, porque su voz les hacía recordar a los argentinos a la de Carlos Gardel. Además, condujo su propio programa de televisión en el Canal 9.
Hombre sencillo y humilde, culto y lector impenitente, “El poeta de la canción”, como popularmente se le llamaba, fue un invencible triunfador de festivales, eventos muy en boga en sus años de mayor relevancia artística. En enero de 1969 ganó el Primer Festival de la Voz de Oro de Venezuela, con Rosario, a los que siguieron sus aclamados triunfos en el Festival Venezolano de la Canción, con Estampa, y el Festival de Sopot, en Polonia, con Van carretas coloradas. Grabó más de un millar de canciones y a lo largo de su eminente carrera se desempeñó también como locutor, actor y animador.
Como actor participó en telenovelas como La señorita Elena y La mujer prohibida, en Venevisión, así como en el cine venezolano, mexicano, colombiano y puertorriqueño. En el filme Cucurrucú paloma actuó junto a Pedro Vargas y en Canta mi corazón y Los hijos que yo soñé compartió con Libertad Lamarque.
Estuvo casado con la actriz y cantante puertorriqueña Sonia Noemí González, de quien se divorció en la década de los 60 y con la cual tuvo un hijo, Robert Dave Johnston, quien vive en Miami y es autor de libros de medicina alternativa sobre cómo bajar de peso, todos de gran éxito editorial.
Héctor Cabrera dejó de existir el 8 de junio de 2003 en Caracas, como consecuencia de un cáncer de próstata. Tenía 71 años.