top of page

Las noticias de economía del 31Ene en Venezuela

Foto del escritor: Leonor JorqueraLeonor Jorquera

La depreciación del bolívar frente al dólar ha alcanzado un incremento de 10%. Foto: Pixabay
La depreciación del bolívar frente al dólar ha alcanzado un incremento de 10%. Foto: Pixabay

Un resumen de las informaciones de importancia nacional en el plano económico venezolano del 31 de enero de 2025


José Guerra advierte la depreciación del bolívar frente al dólar


El economista y exdiputado José Guerra alertó este jueves 30 de enero, sobre la depreciación del bolívar frente al dólar, que ha registrado un incremento de casi 10% en menos de una semana.


Según explicó, esta situación tiene un impacto inmediato en los precios y podría llevar la inflación mensual de enero a niveles superiores.


"Esto es una tragedia en cualquier país porque ese efecto se va directamente a los precios y le pone un piso a la inflación mensual. Probablemente, en enero vamos a ver inflaciones superiores al 10%", dijo en un video publicado en sus redes sociales.


Señaló que Venezuela enfrenta una crisis económica agravada por la inestabilidad política tras las elecciones del 28 de julio, que Nicolás Maduro dice haber ganado.

“Estamos viendo una devaluación diaria del bolívar y una caída constante del salario de los venezolanos”, afirmó.


En Venezuela, el dólar se ubicó este viernes en 68,65 bolívares en el mercado paralelo, mientras que la tasa oficial establecida por el Banco Central de Venezuela está en 57,96 bolívares. Se trata de una diferencia diaria que se acerca a 20%.


El economista advirtió además que la falta de confianza en la moneda nacional, destruida por las políticas de Maduro, es uno de los principales factores que impulsan la subida del dólar.


La inflación anual puede superar 100%


Criticó la ausencia de medidas oficiales para frenar la depreciación y sostuvo que la falta de una estrategia económica agrava la crisis.


“No hay nadie que dé la cara, que explique al país ni que tome decisiones para enfrentar esta situación”, denunció.


Asimismo, alertó que el escenario actual podría derivar en una inflación anual superior a 100%, lo que profundizaría aún más la crisis. “El mayor enemigo de cualquier gobierno es la inflación, porque es el impuesto que pagan los pobres, y hoy están más arruinados con esta devaluación”, concluyó. Con información de elnacional.com


Kpler: Suspensión de crudo venezolano sería un duro golpe a la estabilidad económica de EEUU


Venezuela posee las mayores reservas probadas de petróleo de la Tierra, pero sus proezas energéticas tienen tanto que ver con la calidad como con la cantidad. Según Kpler, las refinerías de la costa estadounidense del Golfo de México procesan cientos de miles de barriles diarios de crudo venezolano.


Para tener una idea, las exportaciones de crudo venezolano a la costa del Golfo de Estados Unidos alcanzaron máximos de seis años en diciembre, al subir a casi 300.000 barriles por día (bpd), 150.000 bpd más que en el mismo mes del año anterior.


Después de México, Venezuela es el principal proveedor de crudo a PADD-3 (costa del Golfo de EEUU), donde importantes refinerías como Valero St. Charles, Chevron Pascagoula y Valero Port Arthur procesan volúmenes de crudo pesado y ácido. Por lo tanto, este hidrocarburo es crucial para la supremacía energética de Estados Unidos.


Por otro lado, este déficit se vería agravado por la limitada disponibilidad de crudo mexicano (debido a la menor producción y al aumento de la demanda interna) y a la posible reducción de las entradas de petróleo canadiense debido a la imposición de aranceles a las importaciones de ese país.


Como prueba de ello, Kpler predice que el Golfo sufriría una grave escasez de entre 200.000 y 500.000 barriles diarios para las refinerías estadounidenses, y las calidades de Colombia o Ecuador sólo podrían sustituir parcialmente estos volúmenes. Estos datos respaldan la necesidad de una distensión entre Estados Unidos y Venezuela.


En otras palabras, si se interrumpieran los flujos de crudo venezolano a la región, estas refinerías tendrían que recurrir a proveedores de menor calidad y menos fiables, una perspectiva que no es deseable para la presidencia que quiere Trump.


Aunque las relaciones entre el presidente Nicolás Maduro y el Partido Republicano han sido históricamente tensas, cada parte está motivada en última instancia por la necesidad económica del flujo de crudo venezolano hacia el norte.


La toma de posesión y el aluvión de órdenes ejecutivas que le siguieron han consumido el ciclo mediático estadounidense, pero las perspectivas de una distensión no se han desvanecido por completo.


Al igual que con los posibles aranceles a los socios comerciales de Estados Unidos, cercanos y lejanos, el nuevo presidente no se deja limitar por prescripciones políticas precisas. El objetivo de Trump, como se suele afirmar, es una nueva edad de oro; sabe que perturbar el ecosistema energético de Estados Unidos sería cruzar un límite prohibitivo.


La administración también se muestra cautelosa ante cualquier asociación con la fracasada política del expresidente Joseph Biden en Latinoamérica.


A Biden se le atribuyó la suspensión de las sanciones sobre el sector energético de Venezuela en octubre de 2023 en virtud del Acuerdo de Barbados, sólo para volver a imponerlas en abril del año pasado.


Las importaciones procedentes de Venezuela al menos han continuado en virtud de acuerdos de licencia especiales garantizados por grandes empresas como Chevron, pero el extraordinario potencial de la nación sudamericana sigue sin explotarse.


Se dice que el presidente Trump reconoce plenamente este potencial. Un análisis del Dr. Cyril Widdershoven de Oilprice.com revela que seguramente Trump se vea tentado a garantizar suministros cruciales al Golfo.


De lo contrario, el cese de las importaciones venezolanas supondría un duro golpe para la estabilidad económica de Estados Unidos y el bienestar general del hemisferio occidental.


En caso de que sean suspendidos, Maduro tendría todos los incentivos para estrechar aún más sus lazos con los antagonistas de Estados Unidos.


Un crudo venezolano barato impulsaría los resultados económicos de los BRICS, el bloque de países no alineados. Y aunque la suspensión de las licencias implicaría una pérdida de flujos de nafta del gobierno estadounidense (50.000 barriles diarios) a Venezuela con fines de mezcla (Chevron es el importador), es seguro que este último recurriría a nuevos proveedores: Irán, gran productor de condensado, estaría más que dispuesto, aunque es una opción más cara.


Sin duda, Trump y sus allegados verían este desenlace como una infracción inaceptable de la Doctrina Monroe, que exige que las potencias extranjeras no interfieran en el hemisferio occidental.


Las recientes declaraciones de Trump sobre el estatus soberano de Groenlandia y la gestión del Canal de Panamá están muy en línea con este punto de vista.


Como tal, el nuevo presidente será cauteloso a la hora de poner trabas a la industria energética estadounidense en beneficio de Rusia, China e Irán, independientemente del sentimiento antivenezolano de su gabinete.


Reanudar las relaciones con Venezuela sobre la base de condiciones comerciales mutuamente beneficiosas —específicamente, el intercambio del tan necesario petróleo crudo por los tan necesarios dólares estadounidenses— es sin duda el mejor camino a seguir. Con información de bancaynegocios.com


Precio oficial del $ vs Bs


El dólar oficial abre el lunes 3 de febrero en Bs 58,44 de acuerdo al promedio publicado por el Banco Central de Venezuela mientras que el dólar paralelo se ubica en horas de la tarde en Bs 68,65




0 comentarios

Entradas relacionadas

Ver todo

21

¡Gracias por suscribirte!

Suscríbete a nuestro boletín gratuito de noticias

Únete a nuestras redes y comparte la información

  • X
  • White Facebook Icon
  • LinkedIn

© 2022 Informe21

bottom of page